29 septiembre, 2023
Tras un aumento significativo del impuesto turístico para los viajeros extranjeros el año pasado, Bután decidió reducir esta cantidad a la mitad, con el objetivo de promover el turismo en el país. Este cambio entró en vigor el 1 de septiembre de 2023 y permanecerá vigente durante cuatro años, hasta el 31 de agosto de 2027.
Como funciona el impuesto?
La tarifa diaria mínima cubre la mayoría de los gastos en el país y está diseñada para garantizar la sostenibilidad del turismo en Bután proporcionando experiencias de alta calidad a los viajeros. Además, parte de este monto también se destina a un Impuesto de Desarrollo Turístico Sostenible, que apoya iniciativas de turismo sostenible en el país. Este paquete mínimo diario incluye:
• Alojamiento en hoteles de categoría turística.
• Todas las comidas.
• Un guía turístico autorizado.
• Todos los transportes internos (excepto vuelos internacionales).
• Programas y actividades culturales organizados por el operador turístico.
La nueva política
Con la reducción del 50%, la tarifa ahora se fija en 100 dólares por persona y noche para los turistas que pagan en dólares estadounidenses, frente a los 200 dólares por persona y noche anteriores. Además, el costo para niños de 6 a 12 años será de US$50 por persona por noche. Los niños que aún no hayan cumplido seis años pueden visitar Bután sin pagar ninguna tarifa.
Cualquier huésped que ya haya pagado esta tarifa para una futura visita a Bután tendrá derecho a un reembolso de cualquier exceso pagado, que se reembolsará a la cuenta de pago original. Cabe recordar que los viajeros con visa de turista pueden permanecer un máximo de 90 noches a partir de la fecha de ingreso.
Este cambio se implementó considerando el importante papel del sector turístico en la generación de empleos y obtención de divisas para el país. Tras la pandemia de Covid-19, la recuperación ha sido más lenta de lo esperado y se espera que la reducción de tarifas aumente el número de visitantes. El gobierno de Bután también reconoce el potencial de beneficios secundarios para las industrias auxiliares, impulsando el crecimiento económico general y financiando importantes proyectos en las áreas ambiental, social y de infraestructura.
Bután comenzó a recibir turistas extranjeros en 1974, y los visitantes siempre han tenido que pagar impuestos turísticos como parte de la política turística del país de «alto valor, bajo volumen«. Los fondos recaudados con esta tarifa se dirigen al tesoro del gobierno y se invierten en proyectos de educación y atención médica gratuitos para todos los butaneses.